


Hacemos una preciosa funda de tela para libros, ajustable y perfecta para los de tapa dura. Un regalo perfecto y un sueño para los amantes de los libros.
Este Sant Jordi nos está dando para mucho: ¡el tutorial de hoy tiene muchas posibilidades! Por una parte, si no te gusta que sepan lo que vas leyendo (en el transporte público, por ejemplo), esta funda preservará tu intimidad como lectora. Por otra parte, tendrás bien protegidos tus libros favoritos. Y además quedan tan bonitos…
Si eres una amante de los libros o conoces a alguien que lo sea, esto te va a encantar. Puedes hacer la funda lisa, como la del tutorial, o puedes personalizarla. Puedes crear una funda especial para tu libro favorito, poniendo su título en un trocito de Kraft Tex o haciendo alguna aplicación que tenga que ver con la historia.
¿Y qué nos dices del marcapáginas integrado? ¡Se nos ponen los ojos como al emoticono enamorado del WhatsApp!
Y si quieres que sea una funda «móvil», para ir colocándola en cada libro que leas, no olvides que la goma es esencial para que se ajuste a las distintas medidas.
Ya verás que en el pdf también te explicamos cómo hacerla reversible, así tienes dos fundas en una.
Descarga el patrón y vamos a por la funda de tela para libros.
¿Qué te parece? Fácil, rápido y con un resultado que es como para forrar todos los libros de casa. Si antes los libros ya tenían un valor añadido como objeto decorativo, ahora muchísimo más.
Además, como necesitas muy pocos materiales y se cose tan bien, puedes hacer muchas: todas para ti o para compartir.
Prepara unas telas bien bonitas: puede ser sólo una o varias. Laura ha elegido uno de los maravillosos packs de Tilda: el Memory Lane. También necesitarás guata, goma y puntilla.
Nos encantaría ver vuestras fundas, así que, ¡por favor!, etiquetadnos con el hashtag #cosiendoconlulu cuando subáis las fotos a las redes sociales.
¡Hasta el próximo tutorial!